Dentro de las actividades programadas por El Ranchito, para los artistas en residencia en Matadero, están los "Open Studios". Jornadas de puertas abiertas al público en el que puede visitar los diferentes espacios de trabajo de los artistas, recabar la información sobre las actividades que se desarrollan.
El equipo de NBDY realizó un ensayo público del Acto 1.
Adjunto la propuesta del proyecto y algunas fotografías:
NBDY
Guión y Dirección: Anto Rabzas
Intérpretes: Tania Garrido e Isabel Sánchez
Música: Emmanuel Nallin,
Audiovisual: Anto Rabzas
Breve descripción del proyecto:
Nobody es una propuesta artística de danza y videoarte de carácter híbrido y experimental pensada para un espacio escénico interactivo, que no encaja con facilidad en las estructuras expositivas disciplinares existentes. (No es teatro, no es danza, no es música, no es videoarte, no es Live Cinema, no es un recital poético) pero pretende unificar estas categorías en una sola pieza y este es el reto.
Interpretada por la Cranämour butoh dance theater company, intenta relacionar las acciones propiamente preformativas de campos como la danza, con los lenguajes audiovisuales, (cine, música, realidad virtual) y la poesía desde un punto de vista multidisciplinar.
Su estructura es la de una serie de Actos - performances cortas 4’ a 12’- que pueden funcionar independientemente pero que al ir unidas por una genética común, conforman la pieza escénica nobody de una duración aprox. de 80 min.
Sinopsis:
Un personaje llega a una sala de espera de alguna terminal de transportes indeterminada.
No recuerda su nombre, ni quién es, ni como ha llegado allí.
No sabe en que tiempo vive, si es que vive, y no es un fantasma.
Es Nadie. Nobody.
Otra mujer habita esta sala de espera.
No sabe si es un reflejo de sí misma, o es otro más de una serie de personajes, no sabe si sueños, recuerdos o realidad que aparecen y desaparecen. En algunos casos su alter ego es el que le habla. En otros aparecen episodios de su vida, su madre, la niñez, su padre…
La sucesión de escenas las van uniendo y acercando peligrosamente a la explicación última de porque se encuentra/n en este estado…
Antecedentes
Los miembros del grupo parten de la experiencia de 8 años trabajando en acciones de deriva urbana por la ciudad de Madrid en entornos siempre públicos (calles, plazas, edificios, iglesias, etc.)
A través de la work in progress, The waste city los rituales de danza butoh son reinterpretados con las claves de las artes visuales contemporáneas, acciones, performances y video arte.
Las acciones que nutren el proyecto asumen la estrategia adaptativa al lugar, ya sea en interiores (teatros, museos, galerías, naves industriales,...) o exteriores (espacios públicos, terminales de transporte, plazas, calles,...)
La misma estrategia adaptiva la aplicamos al tiempo. Su duración será flexible determinada por las circunstancias que concurran en cada ocasión, podría darse el caso de realizar una sola Acción de 8’, de 18’, o de 45’.
Los mismos criterios aplicaremos a las videoproyecciones, adaptando siempre la pieza al nivel de complejidad que permita el espacio y el presupuesto con que se interviene.
Esta metodología nos permite obtener experiencias performativas diferentes partiendo de un núcleo conceptual común, lo que nos facilita seguir investigando y desarrollando nuevas soluciones a los retos que cada tiempo y lugar nos pueda plantear.
Siete puntos de partida para nobody
Nobody asume el principio de hibridación transdisciplinar, relacionando las “las artes del hacer” de campos como la danza, las artes escénicas, los lenguajes plásticos y audiovisuales, (cine, música, arquitectura, realidad virtual) con el arte de la reflexión “el cómo hacer” de la poesía, la literatura, la filosofía y las ciencias.
Nobody asume que lo interesante de un relato es su origen, su principio, -como aparece- y su final -como desaparece- donde un acontecimiento nimio, da cuenta de una gran rueda de cambios y transformaciones, y no considera que el tema, y por tanto la función narrativa del lenguaje, sea el elemento principal de la obra.
Nobody asume que en lo incompleto hay lugar para el crecimiento, se insinúan comparaciones, que sugieren en lugar de mostrar, que se detienen antes de ser explícitas, que se las deja a la capacidad interpretativa del espectador.
Nobody asume que la belleza se nutre del cambio y la permanencia, de la semejanza y el contraste, que recoge siempre algo inexpresable y enigmático, aspirando a relacionarlo como en un todo, sin explicaciones.
Nobody asume que cualquier acto contemplativo consciente, mirar o escuchar con atención, es una forma de ejecución musical en la que uno implica su respiración, su movimiento perceptivo intelectual y su relación emocional con el momento.
Nobody asume que la coherencia siempre es una forma de ritmo. Es el eco de aquella vibración inicial por la que todavía temblamos y necesariamente requiere que el receptor desempeñe un papel novedosamente activo.
Nobody asume la realidad problemática que presenta el cuerpo físico con ese segundo cuerpo, que es el lenguaje. Los dos conforman no sólo la realidad social sino también nuestra realidad personal, nuestra identidad. Nobody es una ficción que hace preguntas sobre qué es una ficción.
Por qué Matadero
La naturaleza de los espacios de Matadero junto a su programación experimental nos supone un reto más para trabajar en esta pieza. La idea de socializar el trabajo de mostrar los procesos subyace en nuestro trabajo, pensamos que siempre hay un enriquecimiento mutuo por las sinergias que podemos encontrar con los proyectos de otros grupos de artistas.
Primer montaje NBDY stop motion